El altramuz y sus beneficios

En el artículo de hoy hablaremos acerca de los beneficios de la proteína de altramuz blanco en torno a calidad nutricional, saciedad, peso saludable, control de la tensión arterial, colesterol, microbioma y control de glucemia.
11 minutos de lectura
38

Seguramente recordaréis el cuento de Jack y las habichuelas (o judías) mágicas, donde estas legumbres parecían tener propiedades que alucinaron al pequeño Jack y trajeron muchos beneficios a su familia. Como si de una fábula se tratara, los altramuces están nuevamente mostrándole al mundo su enorme listado de beneficios (y no solo para la salud).

En el artículo de hoy hablaremos acerca de los beneficios de la proteína de altramuz blanco en torno a calidad nutricional, saciedad, peso saludable, control de la tensión arterial, colesterol, microbioma y control de glucemia.

Echando luz sobre el altramuz

En el año 2016, la 68° Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el Año Internacional de las Legumbres. Con ello se habían propuesto sensibilizar a la opinión pública sobre las ventajas nutricionales de las legumbres como parte de una producción de alimentos sostenible encaminada a lograr la seguridad alimentaria y la nutrición. Y como el altramuz es una legumbre, nos enfocaremos en él.

Según el propio sitio web de las Naciones Unidas (https://www.un.org/es/observances/world-pulses-day), las legumbres son las semillas comestibles de las leguminosas cosechadas para ser consumidas. Los frijoles secos, las lentejas y los guisantes son los tipos de legumbres más comúnmente conocidos y consumidos. Están presentes en las distintas gastronomías de todo el mundo, desde el humus en el Mediterráneo (garbanzos), a un tradicional desayuno inglés (frijoles blancos) o el dal de la India (guisantes o lentejas).

Según este organismo, las legumbres no incluyen los cultivos que se cosechan verdes, como los guisantes verdes o las judías verdes, ya que estos se clasifican como hortalizas. También se excluyen los cultivos utilizados principalmente para la extracción de aceites, como la soja o el cacahuete, y los cultivos leguminosos que se utilizan exclusivamente para fines de siembra (semillas de trébol y alfalfa).

Según los diferentes estudios realizados por el Asia Pacific Journal of Clinical Nutrition, se sugiere que reemplazar semanalmente algunas comidas con base de carne por legumbres, puede tener un impacto positivo en la longevidad, la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y el control del peso, potencialmente a través de efectos favorables en el microbioma intestinal.

Los altramuces son únicos entre las legumbres con una de las mayores cantidades combinadas de proteína vegetal digerible (38%) y fibra dietética (30%). Además, pueden reducir la presión arterial, mejorar los lípidos en sangre y la sensibilidad a la insulina y alterar favorablemente el microbioma intestinal. https://search.informit.org/doi/10.3316/ielapa.908100617189705

La utilización de esta planta se extiende a la producción de concentrados de proteínas que, cuando se agregan a otros productos alimenticios, pueden enriquecer sus valores nutricionales, brindando así alimentos funcionales, como veremos más adelante. La fracción rica en proteínas podría usarse como sustancia para enriquecer diferentes tipos de productos, como pasteles, panes, patatas fritas y sucedáneos de la leche, y también ser un componente principal de los alimentos cuando se eliminan las proteínas animales. https://doi.org/10.1016/j.foodchem.2005.06.036

¿De dónde provienen los beneficios?

Las semillas de altramuz contienen muchos componentes bioactivos. La proteína, que puede corresponder al 35-40% del peso seco, está compuesta mayoritariamente por albúminas y globulinas en una proporción aproximada de 1/9. Las familias más abundantes se conocen como α-conglutina (leguminas), β-conglutina (vicilinas), γ-conglutina y δ-conglutina. La semilla de lupino también es una excelente fuente de fibra, ya que contiene hasta un 39% de fibra, compuesta por un 75-80% de fibra soluble, un 18-25% de fibra insoluble y un 5-9% de hemicelulosa.

El contenido de carbohidratos digeribles es menor que en la mayoría de las legumbres y comprende principalmente oligosacáridos, mientras que el almidón está ausente o es escaso. El contenido de grasa es variable, oscilando entre el 8% y el 12% según la especie, con una buena presencia de ácido α-linolénico (alrededor del 8% al 10% del aceite). La fracción insaponificable del aceite de lupino está compuesta por esteroles (principalmente β-sitosterol) y alcoholes triterpénicos. Las semillas de altramuz también contienen de 6 a 13 mg/100 g de tocoferoles, principalmente γ-tocoferol; 50–230 µg/100 g de semilla de carotenoides, principalmente zeaxantina acompañada de luteína, β-caroteno y α-caroteno. https://doi.org/10.1016/j.jff.2015.08.012

Algunos estudios que avalan los beneficios

En diabetes tipo 2:

Un estudio evaluó el efecto antidiabético de un tratamiento combinado, una fracción proteica (Cγ) más un alcaloide quinolizidina (lupanina), ambos presentes en los altramuces. Se evaluaron diferentes dosis de Cγ más lupanina en las curvas de respuesta de glucosa para identificar la mejor dosis de la combinación para análisis posteriores. Luego, se trató a ratas con diabetes tipo 2 inducida con la combinación de dosis y se evaluaron los parámetros bioquímicos, así como el perfil de expresión del gen hepático, y comparamos estos resultados con los datos obtenidos de ratas con diabetes tipo 2 inducida no tratadas y de animales sanos.

La combinación de dos compuestos naturales de lupino, Cγ + lupanina, proporciona un efecto beneficioso prometedor para una futura aplicación terapéutica en la prevención o el tratamiento de la diabetes tipo 2. La combinación de dosis con el mayor efecto antidiabético fue 28 mg/kg de peso corporal de Cγ más 20 mg/kg de peso corporal de lupanina. Curiosamente, estos hallazgos revelaron que esta combinación mejoró significativamente la hiperglucemia y el perfil lipídico. El perfil de los niveles de expresión génica muestra que los genes Pdk4, G6pc, Foxo1, Foxo3, Ppargc1a, Serpine1, Myc, Slc37a4, Irs2 e Igfbp1 fueron restaurados, en diferentes magnitudes, por lo que su expresión tendió a niveles observados en condiciones saludables. Los principales procesos biológicos asociados con estos genes son el estrés oxidativo, la regulación de la apoptosis y la homeostasis de la glucosa y los ácidos grasos. https://doi.org/10.3390/ph16010117

Reducción del apetito:

Existe evidencia clínica de que los alimentos que contienen altramuz o compuestos derivados del altramuz pueden reducir el apetito después de comer, lo que puede provocar una disminución en la ingesta de alimentos y, en consecuencia, puede influir en el mantenimiento de un peso corporal saludable. En un estudio realizado en 88 voluntarios adultos sanos durante 16 semanas, se observó que un desayuno con la misma energía que el pan de trigo que contenía un 40% de harina de lupino daba niveles más altos de saciedad autoinformada y una menor ingesta de energía en el almuerzo que en comparación al pan elaborado únicamente con harina de trigo. https://www.researchgate.net/publication/228788489_Potential_for_benefit_of_lupin_on_obesity_and_cardiovascular_disease_risk_in_humans

En aterosclerosis e hipertensión:

En un estudio en modelos de ratones, que comparó las proteínas del altramuz blanco administradas a ratones con aterosclerosis con el grupo de control alimentado con caseína, las proteínas del altramuz blanco redujeron la aparición de lesiones ateroscleróticas. https://doi.org/10.1038/sj.ejcn.1602077

Otro estudio, pero de 2001, demostró que la ingesta de 66 g/día de proteína y 15 g/día de fibra tenía un efecto aditivo significativo en la reducción de la presión arterial (aproximadamente 10 mmHg)  https://doi.org/10.1161/hy1001.092614
En 2009, un estudio pretendió determinar los efectos sobre la presión arterial del pan elaborado con harina de altramuz (equivalente a 14 g/día de proteína y 13 g/día de fibra) en comparación con el pan elaborado con harina de trigo en hombres y mujeres con sobrepeso y obesidad. Al analizar los resultados obtenidos, se encontró que el grupo de pan elaborado con harina de lupino mostró una reducción de la presión arterial de aproximadamente 3,5 mmHg en comparación con aquellos que no estaban en el grupo de control. https://doi.org/10.1016/j.appet.2011.08.015

Función intestinal:

La fibra de semilla de lupino contiene aproximadamente un 40% de oligosacáridos, concretamente α-galactósidos. Estos tienen el potencial de aumentar la población de Bifidobacterium en el colon, lo que a su vez favorece un intestino sano. Las bifidobacterias previenen el crecimiento de microbios patógenos y el crecimiento excesivo de microflora perjudicial mediante la producción de ácido, lo que reduce el pH fecal.

Un estudio realizado con 38 hombres sanos proporcionó una mejor función intestinal, redujo el tiempo de tránsito, redujo beneficiosamente el pH de las heces y proporcionó niveles más altos de butirato (un sustrato para el desarrollo saludable de las células del colon) sin alterar las percepciones autoinformadas sobre el intestino. DOI: 10.1007/s00394-006-0603-1

La Proteína de Altramuz BIO de Salengei

El uso de proteínas de origen vegetal ha ganado impulso recientemente debido a sus múltiples aplicaciones comestibles y no comestibles y a su naturaleza biodegradable. Por otro lado, y en vistas del actual panorama climático a nivel mundial, el uso de proteínas vegetales será esencial cuando las proteínas de origen animal no logren satisfacer las necesidades de la población mundial.

Las propiedades fisicoquímicas, estructurales, la composición de aminoácidos y los atributos funcionales de las proteínas de origen vegetal son de gran interés para las industria alimentaria. La harina de altramuz se puede utilizar en la producción de diferentes productos alimenticios, ya sea para aumentar el valor nutricional y/o modificar la textura.

La proteína de altramuz BIO de Salengei tiene un alto contenido en fibra de 28 gramos por 100 gramos de producto, que representan 7,4 gramos por Kcal. Si por ejemplo se toma una medida dosificadora de esta harina le proporcionará 7,8g de fibra (31% de las necesidades diarias según la recomendación de la EFSA). El 90% de esta fibra es insoluble, que es la más indicada para el tránsito intestinal. El 10% restante es fibra soluble. Además, este producto contiene un aporte considerable de oligosacáridos fermentables (fibre-like), constituidos por estaquiosa, rafinosa y verbascosa: 7,6g/100g y 1,9/25g de producto. Todo lo anterior potencia el efecto laxante de la fibra.

Otros beneficios ecológicos adicionales

Además del alto contenido de proteínas, el altramuz tiene una gran capacidad para fijar nitrógeno y liberar fósforo orgánico del suelo y puede utilizarse en la rotación de cultivos durante la producción intensiva de cereales.

El cultivos de leguminosas, como el garbanzo y el altramuz blanco, pueden movilizar el fósforo del suelo y ser buen fertilizante mediante la exudación de aniones de ácidos orgánicos, como el citrato y el malato, y otros compuestos de sus raíces. Hocking y Randall informaron una mejora en el crecimiento y la nutrición con fósforo de cultivos menos eficientes después de sembrar leguminosas que exudan aniones orgánicos. Las rotaciones de cultivos pueden aumentar las concentraciones totales de carbono y nitrógeno del suelo con el tiempo, lo que puede mejorar aún más la productividad del suelo. https://doi.org/10.3389/fsoil.2022.821589

Conclusión

El altramuz blanco se ha utilizado en la nutrición de la raza humana durante miles de años. Hoy en día su uso está limitado por su pequeña escala de producción. Sin embargo, en los últimos años se han descubierto propiedades que podrían tener efectos beneficiosos en la nutrición y salud humana, así como también en el cuidado de los suelos.

Con una población mundial en rápido crecimiento, la seguridad alimentaria y nutricional sigue siendo el próximo desafío para la industria alimentaria. Este aumento de población, sumado a factores como los cambios sociodemográficos, eventualmente ejercerá una enorme presión sobre los recursos globales para proporcionar productos alimenticios nutritivos.

El atramuz es una planta valiosa desde el punto de vista económico y agrícola ya que puede crecer en diferentes suelos y climas. El interés en su producción está aumentando, debido a su potencial como fuente de proteínas, para fines farmacéuticos, abono verde y, debido al alto contenido de alcaloides, como componente natural de pesticidas vegetales.

El interés por las semillas de altramuz crece continuamente, estimulado por su flexibilidad en la preparación de alimentos, así como por el conocimiento cada vez mayor de los beneficios para la salud que proporciona.

La proteína de altramuz BIO de Salengei aprovecha todos los beneficios anteriormente citados y los aloja en un producto de excelente calidad y además con características bio.

Este contenido está disponible sólo para profesionales

Cesta de la compra0
Aún no agregaste productos.